Según  la base de datos de AQUASTAT  de las Naciones Unidas que suministra información sobre el agua y la agricultura por países en los siguientes en sectores como el   uso del suelo y población, el clima y recursos hídricos, el uso del agua, el desarrollo del riego y del drenaje y el    Medio ambiente y sanidad,  la Argentina está bien ubicada  en el ranking de recursos de agua dulce internos renovables.

Cada argentino tiene 7045 litros de agua renovable per cápita. Entendemos por  flujos de recursos  de agua dulce renovables  a  los caudales de ríos internos y al  agua freática originada por lluvias.

Siempre tomando a las Naciones Unidas como referente se estima que para 2030 la demanda de alimentos aumentará 50%, la de energía 45% y la de agua el 30%.

Sin duda el agua, como oro blanco, será un factor determinante en la riqueza de las naciones en pocos años. Se habla lamentablemente de una posible tercer gran guerra, pero esta vez llamándola guerra del agua.

Se reconoce a Islandia como el país con más agua renovable por habitante seguido por Guyana y Surinam. Le siguen en la lista Chile y Perú para luego ubicar a la Argentina.

“Vendrán lluvias suaves y olores de tierra,

y golondrinas que girarán con brillante sonido;

y ranas que cantarán de noche en los estanques

y ciruelos de tembloroso blanco

y petirrojos que vestirán plumas de fuego

y silbarán en los alambres de las cercas;

y nadie sabrá nada de la guerra,

a nadie le interesara que haya terminado.

A nadie le importará, ni a los pájaros ni a los árboles,

si la humanidad se destruye totalmente;

y la misma primavera, al despertarse al alba,

apenas sabrá que hemos desaparecido.”

Extracto de  “Vendrán lluvias suaves”, de Ray Bradbury

Datos estadísticos de Diego Cabot en el diario La Nación.

Imagen Lago Nahuel Huapi en Villa La Angostura Argentina por @RoxBoyer, RoxBoyer Photography