Alexander von Humboldt
nombre sonoro y profundo
En la corriente del Pacífico
supo dos mundos confundir
La América ancestral prodigiosa
rendida a la diosa de su curiosidad
europea. No la mera ensoñación
de botánicas lejanas
………
De los ríos que nutren América
de sentidos sin revelar
De dioses y mares
de montañas y astronomía.
Toda esa vida bullente
que Humboldt siente
No se puede clasificar la planta
sin tocarla.
No se puede entender
el Orinoco
sin haberse hundido
un poco en sus aguas
Donde palpitan al unísono
la flor y la estrella
El libro y la galaxia
la medición y el desatino
Con mucha paciencia
hizo ciencia del vivir
Y de la ciencia
vida que se multiplica
Humboldt, nombre sonoro
y canto profundo.
Extractos de la canción del escritor chileno Antonio Skármeta
Alexander von Humboldt y sumamos a Aimé Bonpland, naturalistas ambos, obtienen del Rey Carlos IV un permiso para viajar a las colonias españolas en América (1799) a bordo de la corbeta «Pizarro».
A su llegada al continente americano recorrieron Cuba para luego tocar tierra firme y recorrer Cumaná (Venezuela) .Las bellezas de las costas de Venezuela los dejaron maravillados por tanto se preparan a recorrer el país.
Estos espléndidos paisajes asustaban e inquietaban a los europeos y lucharon contra lo que era para Ellos, una naturaleza hostil. Viajaron por el Macizo Oriental en mulas o a pie en condiciones complicadas, sin abandonar su propósito naturalista de ir tomando notas y dibujando lo que veían además de tomar muestras al colectar plantas, animales y rocas para estudiarlas, transportando también pesados y delicados instrumentos de medición.
En 1799, exploran la Cueva del Guácharo en 472 metros de profundidad, en la actual Colombia, convirtiéndose así Don Alexander y don Aimé en los precursores de la Espeleología científica de América Latina. Si consideramos la Ornitología, Humboldt le aporta una valiosa contribución, al descubrir un nuevo género y especie de ave: la Steatornis caripensis,orden Caprimulgiformes popularmente llamada «Guácharo». Es un ave frugívora que habita en cuevas y oquedades y su nombre onomatopéyico se deriva del quechua “huach” y significa chillar o llorar por su canto característico. Hoy encontramos allí el Parque nacional natural Cueva de los Guácharos. Esta misma especie de ave da nombre a otro parque natural: El Guácharo, localizado en Venezuela.
Visitaron también desde Bogotá hasta Quito por los Andes, remontaron el río Magdalena y ascendieron por los caminos de la Cordillera.
En Ecuador exploraron varios volcanes, entre ellos el Chimborazo, que en esa época se creía que era el más alto del planeta.
La Oceanografía Física también se ha visto enriquecida con las observaciones y mediciones que hizo Humboldt sobre las aguas del Océano Pacífico, frente a las costas de El Callao, descubriendo la corriente marina que, posteriormente, fue bautizada con su nombre como Corriente de Humboldt.
Es un corriente oceánica fría, conocida también como del Perú, que circula en dirección norte a lo largo de la costa occidental de América del Sur. Se origina frente a las costas de Chile, Perú y Ecuador debido a que los vientos reinantes que soplan paralelos a la costa arrastran el agua caliente de la superficie. Por eso, la temperatura de estas aguas oscila entre 5 y 10 º Celsius siendo, más fría de lo que correspondería, inclusive en las cercanías del Ecuador. Se produce un cambio térmico con el aporte del agua fría -que contiene nitratos y fosfatos procedentes del fondo marino- de los que se alimenta el fitoplancton, favoreciendo así el crecimiento del zooplancton, que se sustenta del anterior. Los peces que se alimentan de zooplancton se reproducen con rapidez, proveyendo así a los pescadores y a las aves marinas. Una corriente fría en zonas cálidas ecuatoriales genera abundantes brumas o hasta nieblas por condensación en las costas de Chile y Perú. Es tan maravillosa la naturaleza que aunque predomina un clima árido desértico crece aquí una vegetación incipiente.
Hoy recordamos a Humboldt como el Padre de la Geografía, disciplina a la que me he dedicado, redescubriéndola los últimos años.
Si bien sus viajes continuaron el propósito de este escrito es revalorizar su trabajo en Latinoamérica.
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